Sabrosa y aromática repostería italiana
El tiramisú es un postre moderno, y no tradicional como se piensa, aunque hay teorías que dicen lo contrario. Es una maravilla culinaria y realmente poco importa si es del siglo XIX o si tuvo su origen en los burdeles del norte de Italia en los años cincuenta.
Se le
atribuyen ciertas virtudes afrodisíacas al mezclar sabores dulces y amargos; el
aroma del café, la canela y el cacao, acompañado de la suave textura de la crema de mascarpone, y el esponjoso
bizcocho, resultan excitantes.
Hay
muchas formas diferentes de preparar tiramisú, aunque los ingredientes no
suelen variar demasiado. Esta receta me la enseñó una compañera de piso Erasmus
que era de Milán, a ella le costó lo suyo conseguirla de su abuela.
Bon appétit!
- Dos
terrinas de queso mascarpone, que suelen ser de 250 g.
- 8
yemas de huevo. Si los huevos no son muy grandes, mejor echar una más.
- Medio
litro de café fuerte más o menos.
- Azúcar
blanco.
- Una
caja de bizcochos.
- Media
tableta de chocolate negro amargo rallada.
- Canela
y cacao en polvo para espolvorear.
- Echamos
las yemas en un bol, todo el mascarpone y una cucharada de azúcar por cada
yema. Lo mezclamos bien manualmente hasta que conseguimos una pasta. Una
vez esté todo bien mezclado, espolvoreamos con canela y volvemos a
mezclar, ya tenemos la crema de mascarpone.
- En una fuente extendemos los bizcochos y los rociamos con el café. Es importante que queden "mojados", pero con cierta consistencia, que no se deshagan. No se le debe echar azúcar al café, ya que los bizcochos son dulces, y así se notará más el contraste con la crema de mascarpone.
- Para montar el postre debemos elegir una fuente rectangular de paredes altas y vamos colocando una capa de bizcochos empapados en café como base. Lo cubrimos "ligeramente" con la crema de mascarpone, ya que debemos reservar más de la mitad, y volvemos a poner otra capa más de bizcochos mojados en café encima.
- Lo
cubrimos totalmente con la crema de mascarpone reservada y sobre esta,
espolvoreamos abundantemente el chocolate rallado y algo de canela.
- Cubrimos
el recipiente con film transparente y metemos al frigorífico. Unas 7-8
horas deberían bastar para que estuviera listo y coja algo de cuerpo y
consistencia, pero es un postre que siempre queda mejor hecho de víspera,
de un día para otro.
TRUCOS:
- Se
puede añadir brandy o algún licor al café.
- Si lo van a tomar niños, es puede sustituir el café por descafeinado.
- Este postre se puede congelar. Se saca de la nevera 3 horas antes de servir.
- Si nos gusta que la crema tenga más consistencia y quede más dura, le podemos añadir a la mezcla del mascarpone un par de claras montadas, esto hará que al meterlo en la nevera se endurezca en un par de horas.
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